Y alli en el Palacio , los consejeros se
reunen y no aciertan en ponerse de acuerdo con la fiesta que se aproxima.
La Soberana comienza a bajar las escaleras de oro y marmol y con todas sus fuerzas se planta y grita señalando un personaje que esta escondido entre las Gotikas columnas.
Es un personaje traido de algun lugar lejos de esos Reinos .- Y quien es este pobre hombre que todo lo observa?
Un pagliaccio de extrañas ropas quien con voz apagada le contesta a la Reina que el quiere tomar agua y que tenia habilidades para embellecer la gran fiesta.
A lo que la Reina le pregunta que quien era el para pedirle a ella agua?.- Mi Reina, dijo el Pagliaccio , os rindo todo mi homenaje regalando mis artes, por un poco de comida y agua.
El agora hombre de suerte, esta inclinado besando el ruedo del riquisimo y engarzado vestido de la Soberana.
.-Pero acaso que sabes tu de artes, le pregunta la Reina ...llevenlo a tocar el clavicimbalo y veremos que tanto dice y hace este buen hombre.
El Pagliaccio se sienta en el taburete y sus dedos recorren el instrumento sacando notas , arpegios y adagios en perfecto orden y resonancia.
Luego despaciosamente se dirige al arpa y sentandose tranquilamente , brinda a los presentes y a la Soberana que no sale de su asombro y refrescando en la memoria los grandes señores de cercanas y lejanas comarcas y reinos que quedara en grandisima gracia con las habilidades del personaje recien llegado.
.- Denle de comer a este buen señor y tambien de beber.
El taciturno personaje, toma sus alforjas y sigue los pasos del sirviente que lo lleva a la despensa donde le alcanza comida y agua y deja una guitarra para que ensaye y le dice que el desea escuchar su voz .
El pagliaccio toma el instrumento en sus manos y sus dedos recorren con suavidad las cuerdas , su voz clara, diafana es escuchada por la Reina que se deja llevar por esas celestiales notas.
Nada mejor puede pedir la Soberana del "Reino Maravilla" , tiene sus perlas del firmamento, tiene a su Principe Consorte , tiene tambien un amante apasionado y un musico en su Corte.
Llega la noche y con ella , los invitados.
Doncellas y esclavas atienden , sirviendo las exquisitos platillos , bebidas y licores de lejanas tierras, prodigas de vides y habiles manos para proveer a la Soberana sus mas ricos y preciados productos.
El Palacio lleno estaba de invitados.
La Reina ya vestida en sedas y brocados de tierras orientales y acompañada por su Principe vestido con elegantes y ricos tafetanes adornados por trencillas de oro .
Tiene tambien una montera de raso brillante y puños de encaje en sus mangas.
Su mirada esta encendida, como la de un angel.
Todos quieren ver el Pagliaccio.
Se ha corrido la voz de sus cuantiosas virtudes en las artes.
Se siente el murmullo y la Reina se recuesta en brazos de su amado para escuchar al musico y sosegar su espiritu alborotado por tanta sorpresa.
El musico temblando, timido comienza a tomar los instrumentos uno a uno...y mientras la musica recorre el aire dejando a todos tan turbados que pasan de la alegria al sueño y resonando ademas de las notas, los ronquidos de los presentes incluso de la Reina y su Principe, en el ambiente.
De la alferecia al sueño y en el piso quedan todos dormidos y aquellos que han comido quedan sus manos llenas de migas de pan y comida.
Manos torcidas, rostros apocados , en todos los recodos y desvanes , alli se encuentran los personajes invitados por la Reina.
El musico continua tocando las notas celestiales mientras el Capitan Houari reaparece en escena buscando a su Amada.
Los celos lo destrozan y la musica lo incita.
El Palacio esta sepultado entre notas y desordenes , entre furia y abrazos.
El Pagliaccio recorre con su mirada pero nada dice, nada hace solo siente que sus dedos se deslizan sobre las cuerdas, provocando un sinfin de sensaciones en las entrañas de sirvientes, doncellas, lacayos e invitados..
Continua...
Eloisaodiosa